
Cuando hablamos de comedones estamos haciendo referencia a los antiestéticos puntos negros y blancos que salen en el rostro. Por eso, si no sabías exactamente qué eran… no te pierdas este artículo porque vamos a hablarte sobre qué son y cómo eliminarlos.
Los comedones abiertos son los puntos negros y los comedones cerrados son las espinillas. El acné es una condición que todo el mundo conoce, porque antes o después se ha padecido este tipo de problema dérmico.
Esto ocurre cuando las células obstruyen un folículo y en el interior se queda atrapado sebo e impurezas. En algunas ocasiones también quedan atrapadas bacterias que puede hacer que también duela y se inflame la zona.
No serías la primera ni la última persona en el mundo que usa las uñas para sacar la cabeza oscura del punto negro y dejar que salga toda la grasa y suciedad.
Pero hacer esto es contraproducente porque si bien es cierto que sacas la suciedad y eliminas el punto negro, puedes generarte marcas, lesiones o incluso que la suciedad se extienda y que te salgan más puntos negros en otras zonas del rostro.
Comedones abiertos y cerrados
Es importante saber diferenciar los tipos de comedones que hay, siendo los abiertos y los cerrados los dos tipos que existen. Cuando el rostro genera más sebo del que puede controlar los poros se obstruyen y aparecen los granitos y los puntos negros.
En la adolescencia los cambios hormonales también puede hacer que aparezcan con más asiduidad. Hay momentos en la vida donde el rostro puede producir más sebo de la cuenta. Esto tapona los poros y aparecen las espinillas y los puntos negros.
Puede ocurrir sobre todo cuando las mujeres tienen la menstruación, están embarazadas o tienen la menopausia. Aunque no te pienses que es un problema exclusivo de mujeres, ¡ni mucho menos! Los hombres también pueden padecer este problema.
De hecho, los comedones cerrados y abiertos no solo ocurren en el rostro, pueden aparecer en cualquier zona de tu cuerpo, aunque en las zonas donde hay más sebo suelen aparecer con más asiduidad.
La zona T del rostro suele ser un lugar bastante común, así como la espalda o el pecho en los hombres. Los comedones cerrados como te hemos comentado más arriba es cuando las bacterias, el sebo y la suciedad quedan atrapadas debajo del poro.
Por otra parte, los comedones abiertos ocurren cuando esto se produce en la superficie cutánea, la cabeza del poro se oxida y se vuelve negro, por eso se llama punto negro.
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No aprietes los comedones
Es bastante tentador apretar con los dedos y las uñas para que salga todo lo que hay dentro, usando la fuerza. Para que la sustancia salga a presión… pero esto puede tener consecuencias muy negativas en tu dermis.
Podrías infectar la zona, dejar cicatrices, hinchazón, que se te irrite la zona… o peor, podrías dejar marcas en tu piel que no se fuesen nunca. Lo ideal es ser consciente de por qué salen y cambiar algunos hábitos de la vida diaria para evitar que aparezcan.
No te pierdas algunas claves que puedes seguir a partir de ahora para evitar que te salgan. Solo tienes que seguir estos puntos e incluirlos en tu vida diaria. Verás que con el paso de las semanas, notarás cambios:
- Buena alimentación. Cuida tu dermis desde dentro, y para ello come alimentos que te permitan depurar bien tu piel y tener un aspecto mucho más saludable.
- Limpia tu cutis. Tienes que limpiar tu cutis cada día, tanto por la mañana como por la noche. Pero recuerda que no debes limpiar tampoco de manera excesiva, porque hacerlo podría hacer que tuvieras más sebo y que el problema se agravase.
- Exfolia semanalmente. Utiliza los mejores exfoliantes faciales para retirar las células muertas y destapar los poros.
- Usa un buen maquillaje y cosméticos. Utiliza siempre maquillaje y cosméticos que no sean grasos y que no sean comedogénicos. De esta manera tus poros no se obstruirán.
- No toques el área afectada. De esta manera no ensuciarás el resto de las zonas ni tu mano, y así evitarás que se extienda la suciedad.
- Usa jabón y agua tibia. Puedes usar dos veces al día agua tibia y jabón específico para acné para mantener el rostro limpio, pero no laves más a menudo o producirás aún más sebo. Dos veces está bien para mantener a la grasa controlada.
- No explotes los granos. No explotes tus granos porque podrías generar cicatrices que te durarían para siempre y propagarías bacterias que te causarían aún más granos y puntos negros.
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Tratamientos profesionales para los comedones cerrados
Cuando los comedones cerrados comienzan a convertirse en un grave problema porque te duelen, te supuran, se infectan… entonces lo ideal es contar con tratamientos profesionales adecuados para acabar con ese problema que tanto te está afectando.
Los tratamientos profesionales pueden conseguir grandes beneficios, siempre y cuando sea un profesional el que se encargue de llevarlo a cabo y de mantener un buen seguimiento.
Existen diferentes técnicas que pueden ayudar a acabar con este problema tan molesto para ti:
- Mesoterapia. Se utilizan microinyecciones en los tejidos subcutáneos para infiltrar sustancias que servirán para potenciar la producción de antioxidantes y que se disminuya la producción se grasa. La técnica se puede sentir como invasiva pero los resultados son seguros. En ocasiones también se puede utilizar la oxigenación de los poros (en casos más graves) para que las bacterias no puedan sobrevivir.
- Peeling químico. Acaba con todos los tipos de comedones. Se acaba con las células muertas y se regenera la dermis. Los poros no se obstruyen y se acaba con los granitos y los puntos negros. Normalmente se hace el peeling de ácido glicólico.
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Algunos remedios caseros
Por supuesto, también existen algunos remedios caseros que te pueden ayudar para que los comedones no sean un problema para ti. Lo bueno es que son formas naturales y sabes que no te harán ningún daño.
Se pueden considerar remedios naturales “de la vieja escuela”, que se han utilizado durante milenios por millones de personas, sobre todo, en épocas donde no se vendían cosméticos porque simplemente, aún no existían.
También son remedios caseros utilizados por tus abuelas y bisabuelas, porque ellas sabían qué ingredientes eran los correctos para conseguir buenos resultados.
Son ingredientes que tienes en tu despensa y que sabes que no te harán daño (excepto si te causan alergias, que en este caso no debes utilizar). De esta manera aunque tengas esos “tapones” de grasa en tus poros podrás deshacerte de ellos.
A continuación vamos a explicarte algunos de estos remedios caseros que te vendrán de perlas. Toma nota y empieza hoy mismo:
- Clara de huevo. Elimina la suciedad del rostro y los puntos negros. Con el rostro limpio extiende la clara de huevo y pon papel higiénico a trozos por encima. Cuando esté seco retírala con cuidado y lava el rostro con agua tibia.
- Azúcar moreno. Es un exfoliante natural estupendo para eliminar las células muertas y la suciedad. Puedes combinarlo con aceite de oliva y que las partículas no sean tan agresivas. Si tienes la piel grasa puedes hacerlo con zumo de limón.
- Yogur natural. Actúa eficazmente contra el acné y los puntos negros. Mezcla el yogur con zumo de limón recién exprimido, aplica en la zona afectada, deja actuar 15 minutos, ¡y verás los resultados!
Como ves, son ingredientes fáciles de encontrar y que además, puedes tener en tu despensa ahora mismo. Te puede ayudar a controlar ese problema de comedones y que tu rostro se vea mucho más terso, liso y saludable.
Ahora que ya sabes qué son y cómo eliminar los comedones, ¡ha llegado el momento de que te pongas manos a la obra! No tienes que sufrir inútilmente para poder disfrutar de un buen rostro, no uses remedios agresivos y opta por lo seguro. ¡Ya sabes cómo hacerlo!