
Exfoliar la piel es una acción importante que debes realizar adecuadamente, Por eso, queremos hablarte sobre el método más efectivo para exfoliar el rostro. Porque independientemente de que decidas usar un exfoliante comercial o uno casero, debes saber usarlo correctamente.
La exfoliación es imprescindible pero también debes saber cuáles son las ventajas de hacerlo bien, de saber cuándo y sobre todo el cómo… Por eso, no puedes perder ningún punto de lo que te vamos a hablar a continuación.
Te convertirás en una experta de la exfoliación y este es un motivo importante para que puedas tener un cutis bien cuidado. Como podrás imaginar, la exfoliación no solo es importante para las mujeres, los hombres también pueden y deben beneficiarse de esto.
Ventajas de exfoliar tu rostro
La principal ventaja reside en acabar con las impurezas y suciedad. Que los poros estén totalmente limpios y que de esta manera evites los brotes de acné y los indeseados puntos negros.
Si exfolias tu rostro una o dos veces por semana (dependiendo de la necesidad dérmica que tengas), tendrás un cutis mucho más saludable y bien cuidado. Pero ojo, recuerda que no puedes exfoliar tu cara todos los días.
Si lo hicieses, estarías destruyendo tu barrera de protección natural de tu dermis y por lo tanto, dejándola al descubierto para posibles infecciones y problemas en la piel (rojeces, molestias, picores, suciedad, granos, etc.).
Tanto si tienes un cutis con acné como si no, la exfoliación es necesaria en todos los sentidos para acabar con las impurezas que se van acumulando en tu dermis.
Todas las pieles se deben exfoliar, pero las que son grasas aún con más ahínco. Eliminarás las células muertas que se quedan en la superficie y dejan un aspecto apagado a tu rostro. Cuando exfolias renuevas estas células y se verá un aspecto más agradable y saludable.
También permitirá que tengas la dermis con una mejor oxigenación y con un tacto más suave. Por si fuese poco, cuando exfolias preparas la tez para que los demás tratamientos que te apliques sean más eficaces.
Notarás al instante una sensación de suavidad en cada centímetro de tu cara que te encantará. Por eso, exfoliar tu cutis no es una obligación, ¡es una necesidad!
Llegados a este punto, es necesario que sepas cómo tienes que hacerlo para que sea efectivo.
En la misma línea: Qué son y cómo eliminar los comedones
Cómo exfoliar tu rostro correctamente
Para hacerlo bien, primero tienes que saber cómo usarlo correctamente. En primer lugar tendrás que humedecer tu rostro pero sin mojarlo en exceso. De esta manera, cuando apliques el exfoliante no la irritarás ni sentirás molestias. Debe ser un proceso suave para ti.
Tendrás que aplicar una pequeña cantidad de sustancia en la palma de la mano y extenderlo. Da pequeños masajes en círculos y después permite que actúe unos 2 minutos.
A continuación enjuaga con abundante agua tibia hasta que haya desaparecido toda la sustancia. Después continúa con tu rutina de cuidado facial habitual.
Sigue leyendo porque es de tu interés: 5 exfoliantes faciales que te van a encantar
Paso a paso
Llegados a este punto, si no te ha quedado muy claro cómo debes exfoliar tu rostro, a continuación vamos a explicarte un paso a paso que te hará entender cómo debes hacerlo (pero teniendo en cuenta el lugar que le corresponde dentro de las rutinas de cuidado facial).
No pierdas detalle y sigue estos pasos para tener una exfoliación perfecta:
- Limpia tu rostro en profundidad para que no quede ningún resto de impureza. Puedes hacerlo con tu producto de limpieza de confianza. Hay personas que usan leche limpiadora, aceites limpiadores… lo eliges tú.
- No seques del todo tu rostro o si lo haces sin querer, vuelve a humedecer un poco para poder aplicar mejor el exfoliante. Será más fácil y las pequeñas partículas del exfoliante no te causarán ningún daño.
- Extiende suave la sustancia, no aprietes ni frotes, y mucho menos si tienes la piel sensible. Lo mejor es que hagas movimientos circulares desde arriba hacia abajo siendo la nariz el centro. Desde las ojeras hacia la nariz, desde la frente hacia la nariz, desde la barbilla hacia la nariz.
- Tienes que evitar el contorno de los ojos y de los labios porque son zonas muy delicadas y podrían causarte algún malestar o irritación.
- Una vez que hayas acabado, aclara el rostro con agua tibia para eliminar la sustancia de manera agradable y después, vuelve a echarte agua, pero esta vez con agua fría para que los poros se cierren.
Seguro que te va a gustar: Exfoliante facial casero: cómo hacer uno
No cometas estos errores al exfoliar tu rostro
Hay veces, que sin darnos cuenta podemos exfoliar el rostro de una manera incorrecta, pero hacerlo puede causarnos problemas dérmicos tanto a corto como a largo plazo.
Tanto si te exfolias tu rostro con cosmética casera como si es cosmética comparada, debes tener algunas cosas en cuenta.
Primero, deberás tener tiempo, no quieras correr porque si lo haces deprisa puede que queden impurezas incrustadas en tus poros.
Esto significa que seguirás teniendo problemas dérmicos y pensarás que la exfoliación no sirve de nada, pero en realidad, no es que no sirva, es que no lo has hecho correctamente.
Además, debes evitar presionar o frotar al extender la sustancia. Es algo común que se hace, así que si te sucede no te sientas mal. Se hace casi de manera inconsciente porque se piensa que de ese modo nos limpiará mejor.
Nada más lejos de la realidad, si presionas o frotas lo único que conseguirás es que te puedas hacer daño. Te podrías causar irritaciones e incluso micro heridas. Lo ideal es que lo extiendas suavemente con los movimientos circulares pero de manera ligera y de forma uniforme.
En el caso de que tengas una dermis sensible, entonces es importante que escojas el exfoliante adecuado a ti. De hecho, los que tengan micro partículas, quizá no sean las mejores opciones en tu caso. En este sentido, será mejor que te centres en los exfoliantes químicos o enzimáticos.
Este tipo de producto son suaves y no dañarán tu dermis.
No te lo puedes perder: Puntos negros y espinillas ¿Sabes cómo prevenirlos?
Exfoliación mecánica o química
Quizá al leer en los párrafos anteriores lo de “exfoliación química” no te haya quedado demasiado claro, por eso, antes de acabar, queremos explicarte qué es y que así puedas escoger mejor el exfoliante que tengas que utilizar en tu exfoliación semanal.
Hay dos tipos de exfoliación: la mecánica y la química.
Cuando nos referimos a la exfoliación mecánica es aquella que requiere un masaje manual porque contiene partículas diminutas que son las que se encargan de limpiar y retirar toda la impureza.
Por ejemplo, en los exfoliantes caseros el azúcar podría ser un procedimiento mecánico dentro de la receta. Es solo un ejemplo, pero cualquier exfoliante mecánico tendrá esas micro partículas.
En cuanto a la exfoliación química, a pesar del nombre que parece “negativo” en realidad es positivo, porque es ideal para las pieles más sensibles. Se trata de exfoliantes a base de ácidos que se aplican sobre la tez y no resulta nada agresivo.
Un ejemplo de ello es el Peeling AHA de Nezeni del que te hablamos aquí.
Ahora que ya sabes cómo exfoliar la piel del rostro, ¡no tienes excusa para tener un cutis radiante y perfectamente limpio! Ponte manos a la obra y disfruta de una piel increíble.